«Si me levanto con el pie izquierdo, trato de hacer cosas absurdas, para ver qué tal me siento. Me pongo una caja en la cabeza y hago muecas raras. Agito los frascos de salsa de la nevera. Le canto a la almohada…»
¿Por qué a veces nos sentimos de mal humor, deprimidos, irascibles, frustrados…? ¿Cómo podemos superar un mal día? ¿Qué hacer si persisten las emociones negativas? ¡No por eso somos monstruos!
Tras Ser o no ser… una manzana y Ese robot soy yo, llega este álbum en el que una nueva heroína de la literatura infantil y juvenil se enfrenta a un mal día, haciendo alarde de una buena dosis de humor, sinceridad e inteligencia. En esta ocasión, el popular autor japonés Shinsuke Yoshitake construye un divertido manual de psicología para todas las edades, con el que los niños y las niñas aprenderán a identificar los distintos sentimientos negativos y a hablar sobre ellos.
No podemos evitar cruzarnos con gente odiosa o que nos pasen cosas desagradables, pero sí podemos gestionar esas emociones y encontrar recursos (¡algunos extraordinarios!) para silbar ante las adversidades y acostarnos cada día sonriendo. Esto es lo que nos demuestra la protagonista de ¡No soy un monstruo! A través de unas ilustraciones llenas de detalles, nos adentramos en sus pensamientos y la acompañamos mientras trata de dejar atrás esa negatividad que, muchas veces, nosotros también cargamos en nuestro día a día.
Yoshitake desenreda la maraña de la ira y el enfado en un álbum al estilo «historieta», lleno de frescura e ingenio. Con un aire caricaturesco, una paleta de colores simples y un trazo limpio, el ilustrador consigue tratar un tema complejo mediante sus particulares giros cargados de humor. «El sentimiento de disgusto tiene mucho poder, y pensé que podría transformarlo en algo positivo cambiando el punto de vista, aunque sin negar lo natural de tener pensamientos más oscuros», explica.